Si bien la discusión sobre salario mínimo es difícil en condiciones en que la economía tiene un comportamiento normal, es natural que será mas complicada en un año inusual como 2020, en el que se ha presentado productividad negativa y niveles de inflación bajos, inclusive meses en los que se observó deflación. (¿Colombia se está Encaminando a una Deflación?).
Fuente imagen: shutterstock
La discusión del aumento salario mínimo entre empresarios, trabajadores y Gobierno, como garante, iniciarán en un contexto de mercado laboral que se encuentra afectado por la pandemia, con periodos con desempleo superior al 20% e inflación en lo corrido del año del 1.38%, según informó el DANE. Bajo este panorama, la discusión salarial deberá enfocarse en la reactivación de la economía y la protección del empleo, dos temas que generan diferencias entre trabajadores y empresarios.
La primera en lanzar una propuesta sobre el aumento del salario mínimo para el 2021 fue la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), la cual pide un incremento del 15%, con el fin de compensar la pérdida de poder adquisitivo que han sufrido los hogares y en aras de incentivar el consumo y por ende la reactivación económica. De inmediato los empresarios prestaron su voz de protesta, argumentando que las empresas también han sentido las consecuencias de la pandemia en sus costos y ventas y lanzaron su propuesta de aumento por el lado de la inflación, la cual creen que cerrara el año entre el 2% y 2.5%.
Lea también: Relación Desempleo e Insolvencia Empresarial en Colombia (Video y Podcast)
En este orden de ideas, algunos analistas y centros de pensamiento económico han puesto sobre la mesa consideraciones para tener en cuenta a la hora de la discusión. Por ejemplo, Fedesarrollo coincide en no aumentar los costos laborales en momentos en el que el desempleo se encuentra elevado y considera que aplicar la fórmula de inflación más productividad podría resultar costoso, pues en momentos de recesión el salario debería disminuir. Entre tanto, el vicepresidente de Anif, Nelson Vera, argumenta que no se deben desviar de la regla universal de inflación más productividad, ya que esto conllevaría a perder la recuperación y por lo tanto el empleo. Así mismo, agregó que el salario mínimo no puede sufrir un incremento desmedido, pues impulsaría aún más la informalidad y considera que debe estar entre el 4% y el 5%.
Lea también: Estimación Impacto Económico de la Crisis en los Departamentos de Colombia (Video y Podcast)
Sin duda alguna, la negociación del salario mínimo va a ser complicada, ya que se tendrán que tomar decisiones con base en una serie de variables cuyos datos se encuentran en incertidumbre, tales como productividad laboral, competitividad, inflación, desempleo, entre otras y no limitarse a fijar un valor, pues el reto es contribuir a la recuperación económica, mantener los empleos actuales y generar nuevos puestos.
Le puede interesar: Recuperación Completa de la Economía se Daría en 2022
