Cuando un emprendedor comienza su propio negocio se involucra en todo: la parte operativo, el manejo financiero, hacer llamadas de ventas, hasta la limpieza. Sin embargo, a medida que la empresa crece, una de las cosas más inteligentes que su propietario puede hacer es despedirse a sí mismo de los diferentes roles que ocupa. Alejarse de cualquier cosa crítica es un reto para los resultados del negocio, pero los emprendedores que tienen éxito han aprendido a reemplazarse a sí mismos. Con la construcción de un equipo para manejar las responsabilidades operativas, los empresarios pueden encontrar más tiempo para centrarse en las prioridades estratégicas y los principales objetivos.
Foto: www.sxc.hu (Autor:Svilen Milev)
Existen tres señales de advertencia a las que se le debe poner atención y muestran que probablemente usted está gastando demasiado tiempo en su negocio y no es lo suficiente, si:
Comienza a sentirse abrumado con pequeños detalles administrativos, que le hacen perder la atención de los temas más relevantes.
Se encuentra en una posición donde nadie desafía su pensamiento porque es el único que tiene todas las respuestas.
No encuentra retos en su vida profesional.
Para hacer la transición de ser una empresa de una sola persona al líder de un negocio con alto potencial de crecimiento, se debe tener en cuenta los siguientes aspectos, a medida que construye un equipo y se despide a sí mismo.
Entienda cual es su Rol más Importante
Su tiempo y atención deben destinarse para aquellas pocas cosas que sólo usted puede lograr. Para muchos emprendedores, esto significa centrarse en las más valiosas oportunidades de ventas y mercadeo. Reunión con clientes clave y construcción de nuevos mercados para su producto o servicio.
Contrate Profesionales en Crecimiento
Para conformar su equipo contrate a personas que puedan crecer con la empresa. Si usted emplea a alguien que pueda realizar una tarea necesaria hoy en día, pero nada más, no va a tener el talento necesario para la siguiente fase de crecimiento de su compañía. Asegúrese de que las personas que contrata comprenden los objetivos de la empresa.
No Infle a sus Empleados
Tenga cuidado de no dar a los empleados títulos inflados. Los emprendedores a menudo se inclinan a dar a una nueva contratación un título ejecutivo, como vicepresidente, en lugar de un alto sueldo o una participación accionaria en la empresa. Pero si la persona no es capaz de llevar las exigencias de este cargo en una empresa más grande, usted se verá obligado a contratar a alguien por encima de él o ella.
Rodéese de Retadores
El problema de manejar una compañía por sí mismo es la imposibilidad de contar con diferentes puntos de vista que confronten sus decisiones, o lo ayuden a tomar mejores. Considere tener un comité asesor que le dé una mano al estructurar la estrategia de su negocio.
*Artículo desarrollado con Información de Havard Business Review, Inc.com.