Su origen se remonta a Londres desde hace más de un siglo y se introdujo en Francia en 1958 con el nombre de “confirmación de pedido”. Nació como una práctica comercial, en el comercio internacional, consistente en el pago al contado y sin posibilidad de recursos de la exportación a crédito. La primera sociedad de confirming fue Confirming House, que se comprometió con el exportador a pagarle al contado, e inmediatamente, la mercancía exportada, contra entrega de los documentos de expedición y otros.
Foto: www.sxc.hu (Autor: Kriss Szkurlatowski)
El Confirming está dirigido a empresas grandes y medianas, comercio mayorista, organismos públicos (estatales, locales y autonómicos) y entidades que lleven a cabo un número importante de operaciones bancarias de pago y quieran evitar su gestión, y que además, deseen brindar a sus proveedores la posibilidad de anticipar sus cobros.
El Confirming también recibe el nombre de factoring al revés, factoring de proveedores, servicio de pagos a proveedores, confirmación de pagos, o gestión de pagos a proveedores. La introducción en España la realizo el Grupo del Banco Santander, que tiene registrada la marca, y que ha supuesto un cambio radical en los sistemas de pagos de las empresas. El sistema se basa en que la entidad financiera ejerce como intermediario entre el comprador de unos bienes y sus proveedores, encargándose del pago de las facturas emitidas por estos últimos.
La sociedad financiera se convierte en una gestora de pagos de su cliente que le ordena efectuar para pagar sus compras a proveedores, de forma que el cliente se olvida de la cuestión de pagos a suministradores, se ahorra todos los gastos de administración de pagos, los documentos de pago y todo el trabajo administrativo.
Ventajas para el Cliente
Seguridad y control en el tratamiento de los pagos.
Suprimir la manipulación del papel.
Permite eliminar la gestión administrativa de los pagos.
El cliente recibe información detallada de las operaciones para su control.
Posibilidad de negociación con el proveedor: aplazamiento de los pagos, ventajas por pronto pago.
Ventajas para el Proveedor
Gestión de cobros. Tiene un producto bancario para anticipar sus derechos de cobro, cuando su cliente no le admite presentar documentos de giro.
Anticipo del 100% del valor actual de ventas según factura (con independencia del plazo de pago pactado) con abono inmediato en la cuenta que indiquen.
Cobertura del 100% del riesgo de impago sobre las facturas anticipadas en operaciones sin recurso.
Su riesgo bancario no se ve aumentado, por lo que no hay consumo de recursos.