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El año 2019 les permitió a los arroceros colombianos recuperarse de una coyuntura difícil asociada a factores claves como el clima, el comportamiento de la tasa de cambio, el incentivo al almacenamiento y las restricciones al contrabando. Los productores experimentaron una recuperación en los precios que les permitieron cubrir los costos y obtener ganancias.
Rafael Hernández, gerente general de la Federación Nacional de Arroceros, manifestó que “hubo varios factores que favorecieron el cultivo, tales como el clima, la tasa de cambio porque frenó el ingreso de arroz de otros países y especialmente de contrabando, al tiempo que hubo un buen desempeño de la Policía Aduanera en las fronteras. De esta manera, el precio se estabilizó”.
El comportamiento de la tasa de cambio fue clave para el sector debido a que con ese precio del dólar se desincentivan las importaciones de países como Ecuador y Perú y se generan expectativas de exportación. Todos estos elementos se consideran que permanecerán hacía el año 2020, llevando al sector a tener un comportamiento positivo dado las cantidades de área sembrada y las proyecciones de producción.
