Las ventas de viviendas no subsidiadas (no VIS) han caído un 70% y las ventas de viviendas subsidiadas (VIS) han disminuido un 80% hasta mayo de 2023. La situación está teniendo un impacto negativo en los negocios y empresas que están relacionadas con el sector de la construcción, ya que la reducción en proyectos de vivienda ha llevado a una disminución en la producción de cemento, las ventas en ferreterías y en minoristas de vidrios, pinturas e insumos.
Entre enero y mayo de este año, se dejaron de vender más de 64.000 viviendas, lo que equivale a una reducción de $13 billones de inversión en el sector. La situación representa aproximadamente un punto porcentual del Producto Interno Bruto (PIB). Se estima una afectación los negocios que proveen materiales de construcción, los cuales generan alrededor de $36 billones al año.
Según la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol) y en un análisis del diario La República, la disminución en la venta de viviendas está teniendo un impacto negativo en la cadena industrial del sector. La situación se refleja en la disminución en los despachos y la producción de cemento y concreto, que representan el 30% de la cadena, según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE).
En términos específicos, los despachos de cemento disminuyeron de 3.50 a 3.15 millones de toneladas, la producción de concreto pasó de 1.15 a 1.02 millones de metros cúbicos y la producción de concreto para viviendas sociales bajó de 1.15 a 1.02 millones de metros cúbicos.
Es importante recordar que, según los registros del DANE, el negocio del cemento y el concreto representa $7.37 billones en el sector de la construcción de viviendas, las manufacturas de hierro y acero generan $7.13 billones, las pinturas y químicos generan $2.87 billones, el PVC y los plásticos generan $2.16 billones, las cerámicas generan $1.53 billones, los cables y conductores generan $1.36 billones, el vidrio genera $990,000 millones y otros insumos generan $1.37 billones.