De acuerdo con un estudio realizado por CSIRO, la Agencia de Investigación Científica Australiana, el gusano del maíz, originario de América, se cruzó con la oruga de capsulas de algodón, generando una plaga híbrida que amenaza distintos cultivos (algodón, tomate y soya) en todo el planeta, siendo Europa, Asia y África los más afectados.
Esta nueva especia fortalecida genera preocupación entre los agricultores, por no tener barreras geográficas. El director de la investigación, Craig Anderson, alertó de las consecuencias de esta plaga y afirmó que “estimaciones recientes indican que el 65% de la producción agrícola de Estados Unidos está en riesgo de verse afectada” El gusano de maíz, también conocido como gusano cogollero, genera raspaduras en follaje tierno que después aparecen como áreas translúcidas, afecta al cogollo y genera perforaciones. El daño más grave se produce cuando la plaga ataca la inflorescencia del cultivo de maíz.
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