El sector del chocolate y la confitería presentó un incremento del 4,4% durante los primeros nueve meses del 2017 respecto al mismo periodo de 2016. A pesar de la dura coyuntura económica dada por el desincentivo del consumo en los hogares, las altas tasas de interés que se presentaron a principio de año y el impacto climático sobre la materia prima fundamental para esta línea productiva; el crecimiento del sector, está por encima de la dinámica nacional.
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En términos regionales, diferentes departamentos pelean por posicionar sus productos, motivo por el cual trabajan en dos líneas. Por un lado, aumentar la productividad, punto en el que el uso de las semillas híbridas juega un papel determinante. Por el otro, diferenciar el producto desde el sabor, el aroma y el origen. Entre los casos más conocidos se encuentra Santander, que produce cerca de 25 mil toneladas al año y que cuenta con dos municipios líderes: El Carmen y San Vicente de Chucurí, este último considerado la capital cacaotera de Colombia.
Entre las ventajas del cultivo en la región es que al igual que en Arauca y Meta, se registran las mayores productividades (ton/h), pues el tratamiento de las semillas la lleva a alcanzar rendimientos de hasta 1.000 kilos por hectárea, un valor alto, teniendo en cuenta que la media nacional está sobre los 460 kilos/hectárea.
En el caso de las exportaciones de cacao en grano, estas presentan un comportamiento descendente, igual que las importaciones. Si bien el cacao colombiano se ha venido posicionando cada día más en los mercados internacionales como fino de sabor y aroma, la caída de los precios del producto en los últimos meses ha desincentivado su salida, generando una sustitución en las importaciones, lo cual es conveniente si se tiene en cuenta el alto precio del dólar frente al peso.
En cuanto al futuro de los cultivos de cacao, este es prometedor, teniendo en cuenta que el gobierno nacional recientemente elevó la meta para 2018, tanto en el número de hectáreas erradicadas de forma forzosa, como en las erradicadas de forma voluntaria. En el primer caso la meta se elevó a 65 mil, luego que la fuerza pública superara el objetivo de 2017, ubicado en 50 mil. En el caso de la sustitución voluntaria, la meta también era de 50 mil y según el presidente de la república, Juan Manuel Santos, a mayo de 2018 se alcanzará las 65 mil; todo depende de algunas negociaciones que se están llevando a cabo.
Empresarialmente, uno de los mayores pronósticos para 2018 lo tiene la empresa Aldor, que tiene por objetivo consolidar una fábrica en Sudáfrica y ampliar su vocación exportadora. Así mismo, la firma vallecaucana aspira a comercializar 54.000 toneladas de dulces en 2018, lo que representaría un alza del 8% frente al ejercicio de 2017.
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