Por medio de una carta en la que manifiesta la preocupación y afectación por parte de la minería ilegal, la minera Gran Colombia Gold envió una carta al presidente de la República solicitando intervención militar y policial urgente en Marmato, Segovia y Remedios.
La empresa aseguró que para ellos es prioridad proteger los derechos de los trabajadores de la empresa y propio del Estado Colombiano, por lo cual en la misiva resaltan que “en el caso de Marmato las propiedades de la compañía se encuentran invadidas en gran medida por los mineros ilegales que operan en más de cien minas ilegales, lo que impide que la empresa opere en gran parte del área de sus derechos mineros”.
La multinacional denunció que los mineros ilegales, en las mesas de diálogo que han sostenido, obstruyen y retrasan los procesos de desalojo y el tratamiento por parte del Gobierno es precario.
