Actualmente las empresas invierten más de la mitad del presupuesto de Tecnologías de la Información en migrar al modelo de consumo de tecnología de nuestro tiempo: La Nube, así lo ha afirmado la más reciente estimación de IDC. Se calcula que en los próximos cinco años 43% de la capacidad de cómputo de las empresas a nivel global estará alojado en servicios de nube pública y 78% hibrido. El modelo de computación de la nube facilita innovar, operar de lo local a lo global, mejorar el servicio al cliente y transformar procesos.
Colombia es un mercado creciente para este tipo de computación. El modelo permite a compañías que se ven obligadas a mantener centros de datos poderosos realizar inversiones en tecnología a bajo costo, con un modelo en el cual se paga según el consumo y es escalable, flexible y tercerizado.
La seguridad es el temor más relevante al momento de pensarse en este tema; sin embargo cada vez hay más consenso entre los especialistas en que la protección de una nube pública es mayor que la de un centro de datos propio de una compañía. Las empresas de telecomunicaciones se han convertido paulatinamente en jugadores importantes del negocio de la nube, estos poseen la capacidad de ser la autopista de transformación digital por el ecosistema que poseen, por la conectividad que ofrecen y los anchos de banda que la nube necesita.
Bancolombia, el ICFES son algunas de las compañías nacionales que operan bajo este sistema. A nivel mundial Netflix, Amazon, La Nasa son clientes emblemáticos de este servicio.
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