El comportamiento del sector petrolero afectó el desempeño del transporte de carga hacia finales de 2014, adicionalmente a comienzos del presente año se presentó una importante inmovilización que paralizó el sector y afectó la economía colombiana. En la actualidad se visualiza la inversión en infraestructura como un apoyo en la mejora logística del país.
La importancia de los vehículos pesados radica en que estos son fundamentales para el transporte de diferentes bienes de una manera ágil, rápida, segura y permanente. En Colombia más del 70% del total del volumen de carga es movilizada por carretera, seguido por el sistema ferroviario y el fluvial.
Las cifras del sector en 2014 fueron positivas con un incremento de 3.4% en la carga transportada y crecimiento del PIB del 3.7%. A pesar de ello el año 2014, según Colfecar, terminó con un sector transportador desacelerado debido a la caída de los precios del petróleo y la ralentización de la industria minero energética. Para el cuarto trimestre de este año la cantidad de toneladas movilizadas disminuyó en 0.11% con respecto al mismo periodo de 2013. Para este periodo también se redujo la facturación en 3.95%.
Fuente: Colfecar
A su vez, la situación de los trasportadores no ha sido favorable, han sido constantes las inmovilizaciones del sector en los últimos años, según Colfecar por tratarse de un mercado que en Colombia presenta relaciones económicas desequilibradas.
Durante los meses de febrero y marzo de 2015 se presentó la última inmovilización del sector, donde los detonantes de la crisis fueron los altos costos operativos, la disminución en el precio de los fletes, el lento avance de los procesos de chatarrización y la demora en los pagos de los servicios prestados.
A futuro, se estima que finalizando esta década, la inversión en infraestructura de transporte sea equivalente al 3% del PIB. La definición de corredores logísticos estratégicos, los proyectos de infraestructura 4G y decisiones como el acuerdo para terminar las obras del Túnel de la Línea traerán importantes beneficios para el sector transportador por las mejoras en la conectividad que esto implica y para la competitividad de las diversas industrias que deben movilizar sus insumos y productos por estas arterias viales.
También se está impulsando desde el Ministerio de Transporte la modernización de los puertos, lo que junto a proyectos como la recuperación de la navegabilidad del río Magdalena puede beneficiar la conformación de adecuados sistemas de transporte multimodal para el país, pero que algunos miembros del gremio transportador interpretan como competencia entre medios de transporte.
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