En lo transcurrido del 2015 el sector del transporte terrestre de carga se encuentra movido por tres elementos fundamentales: aspectos relacionados a la infraestructura vial que espera ampliarse en 8.200 kilómetros a 2022, el costo de los combustibles y peajes, y las huelgas. Estas últimas, algunas veces gestionadas por los gremios del sector y en otras, obligadas, por razones de políticas fronterizas, atentados terroristas e incidentes climáticos como derrumbes y avalanchas.
En el caso de las vías, el efecto de estas inversiones sobre el transporte de carga ha sido múltiple. Por un lado, se ha dinamizado la carga transportada ante el requerimiento de materiales necesarios para la recuperación, ampliación y elaboración de la malla vial. Por otro lado, en el caso de las vías que ya están culminadas, se ha presentado una disminución en los tiempos de viaje, que se traducen en ahorros operativos.
Fuente: Colfecar
El segundo factor que ha movido el transporte de carga, es el precio de los combustibles y los peajes. En las regiones fronterizas con Venezuela la situación se presentó ante el anuncio del presidente de ese país el 19 de agosto de cerrar la frontera con Colombia, con el argumento de evitar el contrabando y ejercer soberanía sobre su país. El hecho hizo escasear los combustibles, en su mayoría importados del país vecino, encareciendo sus precios, lo que a su vez elevó los costos operativos del transporte de carga.
El tercer gran campo de acción en el sector transportador hace referencia a las huelgas y la obstaculización en el sistema de cargas. A nivel de huelgas, en marzo se registró la primera. En ella se estableció un acuerdo de 35 puntos relacionados al Sistema de Información de Costos Eficientes para el Transporte Automotor de Carga, CISE – TAC.
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Sectores relacionados: Automotriz, Construcción de Obras Civiles, Combustibles.
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