Durante la Cuaresma y la Semana Santa se cambian algunos hábitos alimenticios por ciertos días de la semana, como abstenerse de consumir carne. Esta tradición ha llevado a un aumento en la disponibilidad y consumo de pescado, convirtiéndolo en una alternativa popular durante este periodo.
Según el Ministerio de Agricultura, algunas de las especies de pescado más consumidas durante este período incluyen la mojarra, el pescado seco, el bagre rayado del Magdalena y la picuda, entre otras. Datos de años anteriores revelan que el consumo de pescado aumenta significativamente durante la Semana Santa, llegando a incrementarse hasta un 60% en comparación con otras semanas del año.
La Autoridad Nacional de Acuicultura y Pesca (Aunap) informó que, en años anteriores, se evidenció un aumento del 50% en la demanda mayorista de productos pesqueros cada viernes durante la Cuaresma, alcanzando su punto máximo durante los días santos con un aumento del 70%. Se estima que el 15% de la producción total de pescado durante la Semana Santa proviene de la pesca artesanal, el 24% de la pesca industrial y el 61% de la acuicultura.
En 2023, Colombia registró una disponibilidad de 30.000 toneladas de pescado solo para la Semana Santa, con un consumo que osciló entre tres y cuatro veces más alto que el promedio habitual, según Aunap. Esta producción fue posible gracias al esfuerzo de 125.000 pescadores y 3.745 acuicultores formalizados en el país, quienes recibieron apoyo en forma de equipos, capacitación y prácticas pecuarias adecuadas.
Aunque aún no se han publicado los datos oficiales para el presente año, se espera que el consumo de pescado durante la Cuaresma y la Semana Santa continúe siendo significativo.
Lea también: La industria piscícola estima una baja en la producción de 15% en 2024