En lo corrido del 2016, el mundo ha sido testigo de grandes cambios geopolíticos, ejemplos de estos han sido el Brexit en junio, la destitución de la presidenta de Brasil en agosto (¿Resurgirá Brasil con Temer en la Presidencia?), la renuncia de la presidenta de Corea del Sur en noviembre y ahora la renuncia del primer ministro de Italia.
Fuente: Pixabay
En Europa, el 23 de junio, mediante referendo, se definió el futuro del Reino Unido, donde el pueblo inglés decidió que su país dejará de ser parte de la Unión Europea. Esta situación generó una marcada inestabilidad financiera, no solo para la región, sino para el mundo entero. (Reino Unido ¿Se Queda o se Va de la Unión Europea?).
El 4 de diciembre, un nuevo referendo fue protagonista en Europa, en este caso exactamente en Italia, donde el primer ministro Matteo Renzi puso a consideración del pueblo la posibilidad de agilizar el proceso legislativo reduciendo los poderes del Senado y de las autoridades regionales. Los resultados oficiales dieron la victoria del “no” a la reforma constitucional con un 59,95% y concluyeron con la dimisión de Renzi.
Italia ha presentado una recuperación económica tímida desde el año 2015, tras tres años de recesión, sin embargo con el Brexit su situación cambió debido al impacto en el comercio y la debilidad de su banca. El menor crecimiento en las exportaciones y la incertidumbre política para las empresas y consumidores han conllevado a estimaciones de crecimiento del PIB en un 0,8% para 2016 y 0,6% para 2017.
Ahora la duda para las economías latinoamericanas, como la colombiana, es ¿si con el panorama de Italia se tendrá algún efecto?
Colombia tiene suscrito desde el año 2012 un acuerdo comercial con la Unión Europa, donde Italia se ubica como quinto destino de las exportaciones a esta zona con un valor cercano a los 500 millones de dólares. Los principales productos colombianos que consumen los italianos son petróleo, hullas, bananos, café y cuero.
Si bien la relación entre ambos países ha sido positiva, sólo hasta octubre de 2015 Colombia recibió la primera visita de un jefe de gobierno italiano. Y, a su vez, en el caso del gobierno del presidente Santos, ese mismo año se realizó la primera reunión personal con el primer ministro de Italia. Esta situación refleja que no existe una dependencia marcada económica y política entre ambos países.
Un efecto negativo para la economía colombiana se presentaría en caso de que Italia decida retirarse de la Unión Europea, situación que conllevaría a poner en riesgo el nivel de exportaciones que se tiene con esta nación. Sin embargo, las ventas internacionales de Colombia a este país representan el 0,9% del total de exportaciones, lo que no implica un impacto alto en caso de materializarse el riesgo.
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