Contar con la capacidad de que, ante una situación compleja, esta se pueda descomponer en partes más pequeñas y manejables para los equipos de trabajo; es decir, contar con pensamiento analítico, es la habilidad más preciada y requerida por las empresas en la actualidad.
Es que el pensamiento analítico permite navegar en las aguas volátiles empresariales de la actualidad, y ante la complejidad se necesita el complemento de equipos ágiles, resilientes, flexibles, la influencia social, el pensamiento creativo y la motivación. Lo anterior, en la actualidad, para el 2030, en un mundo con una alta participación tecnológica, navegarlo, requerirá de inteligencia artificial, big data y alfabetización en lenguajes tech.
Ese panorama al 2030 es idéntico por sectores, la inteligencia artificial y el big data será la habilidad que más estará demandándose en sectores como el automotriz, la logística, la salud, las telecomunicaciones, la energía, los bancos y los seguros; y, a su vez, manejar lenguajes tecnológicos es lo que más solicitarán empresas en actividades como la educación y la producción de bienes de consumo.
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