La producción y las ventas de la industria panificadora no se han visto afectadas por la pandemia, de hecho, han continuado creciendo. Sin embargo, el alza en los costos de producción es una de las grandes preocupaciones del sector, que, en 2021, según datos de la Asociación Nacional de Fabricantes de Pan (Adepan), evidenció el cierre de cerca de 4.000 establecimientos pertenecientes a pequeños productores.
El incremento en el costo del maíz dadas las afectaciones climáticas en Canadá a finales de 2021, así como el alto costo fletes marítimos, la guerra entre Rusia y Ucrania y la suspensión de exportaciones desde India, han elevado el precio internacional del insumo, importado en Colombia en un 99,7%. Pese a que los cambios en los hábitos de consumo, así como la baja elasticidad en la demanda de bienes del sector seguirán impulsando un crecimiento en la producción y las ventas, se hace necesaria la inversión en tecnología y la búsqueda de materias primas alternativas que reduzcan los costos operativos y generen ventajas competitivas en la industria.