Según el Ministerio de Agricultura, la producción de flores y follajes en el país incrementó en el periodo 2018-2022 un 23,81% y se ubicó en 338 mil toneladas. En el caso de las exportaciones, el valor total de flores de corte entre enero y julio de 2023 frente al mismo período de 2022 descendió un 2%. EE.UU. continúa siendo el principal destino, aun con una caída, para el periodo en estudio, del 3,2% en valor y del 7,9% en volumen, lo cual indica que la fortaleza del peso frente al dólar y la inflación en ambos países no ha favorecido el sector. En relación con las expectativas, el sector depende en gran medida del comportamiento de la TRM y la inflación de Colombia y de EE. UU., a lo que se agrega la de Ecuador, principal competidor regional y de nicho de mercado.
Ecuador tiene una economía dolarizada, así, Colombia toma ventaja cuando el peso se devalúa frente al dólar, pero pierde cuando la inflación es elevada, dado que las flores es una industria intensiva en mano de obra formal. Así, Ecuador ha tomado impulso al lograr tener una inflación controlada comparativamente, por debajo de 4% en 2022, frente al 13% de Colombia. Con Kenia, otro de los principales competidores, el escenario es más complejo, dado que la rentabilidad del negocio en ese país está fundamentada en limitadas condiciones laborales, que afectan a cerca de dos millones de jornaleros, y que hacen posible que Kenia sea el cuarto productor y exportador mundial de flores.
