América Latina se está consolidando como un destino clave para las inversiones en energía solar, y Colombia emerge como uno de los países con mayor potencial en generación distribuida.
De acuerdo con el diario Portafolio, México encabeza la adopción de tecnología fotovoltaica, seguido de países como Brasil, Panamá, Chile y Colombia, donde las inversiones en equipos trifásicos e híbridos con almacenamiento han aumentado significativamente. En Colombia, la expansión de los sistemas solares de generación distribuida responde a la necesidad de diversificar la matriz energética, una estrategia que también impacta positivamente en el comercio y los sectores residenciales, contribuyendo al objetivo de reducir la huella de carbono.
El sector de la energía solar en Colombia se suma a una tendencia regional en la que países como Panamá han alcanzado 112,78 megavatios (MW) de generación distribuida hasta mediados de 2024, con un crecimiento del 78% en los últimos cinco años. Estas inversiones en infraestructura solar no solo fortalecen la competitividad energética en Colombia, sino que también avanzan en los compromisos climáticos globales, vitales para contrarrestar el incremento de más de 1°C en la temperatura del planeta respecto a los niveles preindustriales.
Lea también: El Caribe representa el 54% de nuevos proyectos de generación de energía