Actualmente, el país depende en su mayoría de fertilizantes e insumos agropecuarios del extranjero. Del 95% que se importa en el país, la mayoría viene de Europa y Venezuela. De hecho, Colombia se encuentra en el top 20 de países que más dependen de fertilizantes de Europa. El país no posee una producción fuerte de potasio, nitrógeno o fósforo.
Las necesidades del país rondan los 2 millones de toneladas, de los cuales, solo el 5% corresponde a producción local, y para la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC), para tener un buen rendimiento en el campo se necesitarían 3 millones de toneladas. La poca producción local se ha visto estimulada por el incremento en el precio de los fertilizantes europeos por culpa de la guerra en Ucrania.
Empresas locales, como Yara, han dicho que incrementarán la producción local para amortiguar el déficit. Aunque, para algunos expertos, el país aún no cuenta con la capacidad de producir en el corto o mediano plazo componentes de materias primas. Las empresas concuerdan que la producción para el consumo local debe aumentar para mejorar la productividad del agro colombiano y asegurar el futuro alimentario del país.