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Según el gremio asegurador, la coyuntura que atraviesa el país a causa de la pandemia del coronavirus ha tenido un impacto importante en las reclamaciones del ramo de arrendamientos, pues el incremento en el nivel de incumplimiento de contratos ha representado para el sector el pago de más de 183.000 millones de pesos entre el inicio de la cuarentena y el 30 de julio, convirtiéndolo en uno de los productos con más reclamaciones en el país.
Según Fasecolda, ante la situación, las aseguradoras han actuado como mediadoras entre arrendadores y arrendatarios, con el fin de lograr acuerdos que permitan conservar las relaciones contractuales entre las partes, y encontrar alternativas para superar la crisis de la mejor manera. Un seguro de arrendamiento solo puede ser otorgado por una compañía de seguros vigilada por la Superintendencia Financiera de Colombia, y ampara al arrendador ante el incumplimiento en el pago de cánones, servicios públicos y cuotas de administración, y en el caso de arrendamiento comercial, garantiza también el pago del IVA.
