Recientemente la bancada conservadora del Congreso de la República anunció la radicación de una iniciativa que busca aumentar la edad mínima para el consumo del alcohol y tabaco 3 años más, es decir, sólo las personas mayores de 21 años podrán acceder a estos productos.
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Foto: www.sxc.hu Autor: ajkTreno |
La propuesta se radicaría en marzo del 2015, pero desde ya abre varios interrogantes, especialmente entre los productores de alcohol, quienes consideran que elevar la edad aumentaría las cifras de contrabando e ilegalidad. Además las críticas se centran en la connotación populista de la iniciativa, que busca combatir los flagelos a través de las prohibiciones, toda vez que ya se ha comprobado que en muchos casos causan el efecto contrario al esperado.
El senador Hernán Francisco Andrade, promotor de la iniciativa, explicó que el proyecto nace de la necesidad de frenar el desbordado uso de alcohol que se viene registrando en la juventud colombiana. “Tenemos que cuidar nuestra juventud y niñez, en Londres, Canadá y algunos estados de Norteamérica esa es la apuesta, prohibición total para los menores de edad y sanciones para los padres que descuiden a sus hijos. Vamos a apostarle a unas normas más estrictas y esperamos que los partidos nos apoyen en ese empeño”.
Sin embargo, para la industria esta propuesta no es nada alentadora pues consideran que la prohibición aumentaría el contrabando, un flagelo que ya es de considerable proporciones en el país. Y es que Colombia ocupa los primeros lugares de América Latina donde más crece el ilícito, la nación deja de percibir $900 mil millones por culpa del contrabando.
Según un estudio de la firma Euromonitor International, una de cada 4 botellas de licor que consumen los colombianos es ilegal, es decir, o entró de contrabando –sin pagar los impuestos respectivos– o está adulterada. Entre los seis países observados en el estudio, Colombia tiene el mayor mercado de alcohol ilegal, con un valor de 1.041 millones de dólares en el 2012. El estudio también destaca que “la alta carga tributaria estaría impulsando el crecimiento del mercado ilícito a un ritmo seis veces mayor que el del mercado legal”.
El aumento del mercado ilegal de alcohol, que crece más rápido que el legal, genera una preocupación general. Mientras el crecimiento de la legalidad fue de 2,9 por ciento, el de la ilegalidad fue de 19,2 por ciento de un año a otro, destaca el estudio hecho por la firma.
En el caso del tabaco, según la Fundación de Educación Superior y el Desarrollo (Fedesarrollo), “el contrabando de cigarrillos en el país se concentra en la ruta que une a La Guajira con Antioquia. Aquél departamento representaba, para 2012, más del 49% de la participación regional en el tráfico de cigarrillos. El 14% del mercado de cigarrillos es de contrabando.
Por otro lado, la prohibición es una herramienta fuertemente criticada, pues la generación de conceptos negativos, terminan generando efectos contrarios a los propuestos. El senador Roy Barreras, ha reiterado en varias ocasiones que lo prohibido sólo incrementa el poder de las mafias y su actividad narcotraficante.
Por ahora, la propuesta es sólo un esbozo, que entrará en debate en marzo y que evaluará cuál es la forma correcta de contrarrestar los problemas generados por el alcohol y el tabaco, si a través de la prohibición o por medio de la educación, con información concreta sobre el tema, para que las personas estén conscientes de él y sean ellos mismos los que decidan sus acciones.
