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Tesla, líder en el diseño, fabricación y venta de automóviles eléctricos, está anticipando que a partir de 2022 y en adelante enfrentará una escasez de las baterías para sus autos y, pese a que esto lo ha llevado a aumentar los requerimientos a sus proveedores, deberá empezar a producir sus propias baterías para dar respuesta a la demanda proyectada. El proveedor tradicional de estas piezas para los vehículos de Tesla ha sido Panasonic.
En palabras de Elon Musk, director ejecutivo de la compañía, “nuestra intención es aumentar, no reducir, las compras de celdas de baterías a Panasonic, LG y CATL. Sin embargo, incluso si nuestros proveedores van a máxima velocidad, aún proyectamos una escasez significativa en 2022 y en adelante, a menos que tomemos medidas nosotros mismos”.
