La apertura de los mercados para la importación de Etanol tiene contra las cuerdas al sector cañicultor, pues su libre importación a precios ampliamente menores a los que se comercializa en el mercado nacional ha golpeado fuertemente los productores.
Desde mayo pasado, el gobierno dio la vía libre a la importación de biocombustibles, sumando hasta la fecha 24 millones de litros, es decir, el 20 % del mercado local, ocasionando molestias en el gremio industrial, con el agravante de que el producto importado, ingresa al mercado local casi a mitad de precio del que se produce en Colombia, presentando una menor calidad.
De acuerdo con las cifras de la Asociación de Combustibles Renovables, mientras que un galón de etanol de maíz de Estados Unidos cuesta $5,400 en el país el valor del galón, obtenido de la caña de azúcar, equivale a $8,559, es decir, un costo 37% menor, por lo que los grandes distribuidores de combustibles prefieran importar el insumo de EE. UU. a comprar en el territorio nacional.
Cabe destacar que el etanol producido en los EE. UU tiene una calidad muy inferior al que se produce en Colombia, pues se estima que el producido de caña de Colombia aporta en términos de reducciones de emisiones 74%, mientras que el de maíz producido en Estados Unidos solo el 10%.