El pasado viernes 10 de marzo, la Corporación Federal de Seguros de Depósitos tomó el control del Silicon Valley Bank en EEUU debido a una ampliación fallida de capital, equivalente a US$2.300 millones, lo que ocasionó el desplome de sus acciones. Este colapso ha generado que cientos de nuevas empresas deban enfrentarse a una escasez de liquidez, de no encontrar un comprador para la próxima semana, la cual, hasta ahora, es considerada como la única solución.
Según una encuesta elaborada por el Wall Street Journal, quien preguntó a aproximadamente 3.000 empresas activas, 400 tenían cuentas SVB, de estas 100 temen no poder hacer frente a las nóminas en los próximos 30 días. Por ahora, los depositantes tienen asegurados US$250.000 en efectivo, mientras que aquellos no asegurados recibirán un certificado de administración judicial por los recursos restantes.
Además, esta eventualidad también ha traído consigo efectos sobre las bolsas internacionales, pues, estas iniciaron operaciones el lunes 13 con importantes pérdidas. Por ejemplo, el índice Nikkei de la bolsa de Tokio descendió hasta el 1,7%, mientras que el Topix, el cual incluye las firmas de mayor capitalización se redujo en un 2,15%. Así mismo, las bolsas europeas también registraron importantes pérdidas: el índice bancario Stoxx de Europa bajó un 5,17%, y, las bolsas de Londres, París, Fráncfort, Madrid y Milán registraron pérdidas de 1,8%, 2,6%, 2,3%, 3% y 3,4% respectivamente.