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Las estadísticas presentadas por la Superintendencia Financiera mostraron que en los primeros cinco meses de 2021 a través de las distintas líneas de consumo se desembolsaron $44 billones, es decir $14,4 billones más que en igual periodo de 2020.
De acuerdo con el reporte de la Superfinanciera las líneas de libranza y vehículo le han aportado 3.1 puntos porcentuales a la dinámica de crédito de consumo en el último año, mientras las líneas de tarjeta de crédito y créditos rotativos contrarrestan el efecto.
Con base en información del diario El Tiempo se analiza que la libranza “ha cobrado gran fuerza en los últimos años, entre otras razones, debido a sus características, pues está dirigida a trabajadores formales a quienes el pago mensual se les descuenta de su salario, lo que hace que los niveles de morosidad de esta cartera sean de los más bajos del sistema”.
