El pasado 2 de agosto, Panamá decidió aprobar un decreto en el que incrementa las tasas de importación sobre los sectores de flores, vestuario, cemento y carbón provenientes de Colombia, el cual comenzó a regir desde el 16 de agosto del presente año, como consecuencia de las medidas del arancel mixto tomadas por el gobierno colombiano.
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Autor: Carlos Angulo
Desde el 2012, Colombia ha aplicado un cargo de 5 dólares por cada contenedor Panameño, con el fin de evitar el contrabando y el lavado de dinero. Además, extendió hasta noviembre el cobro del arancel del 10% a los calzados y textiles provenientes de la zona libre de Colón (zona franca localizada en la costa caribeña de Panamá ) el cual fue declarado ilegal por parte de la OMC. El ministro de economía y finanzas de Colombia aseguró que la razón por la que extiende este decreto, es la protección a los empresarios colombianos de la competencia panameña.
Esta medida fue rechazada por Panamá, que decidió en una nueva resolución aumentar el arancel a la importación de flores del 15 % al 30 %, el de las prendas de vestir de entre el 10 y 15 % al 30 %, el del cemento del 0 al 30 % y el del carbón del 0 % al 15 %.
Si bien el arancel a las prendas de vestir implica una barrera, no inquieta al sector ya que representa un mercado de menos de US$12 millones. Aunque por ahora esta es la única medida tomada por parte del gobierno panameño, también ha decidido aprobar el proyecto de ley de la figura de retorsión, la cual contempla fuertes medidas para los países que ejerzan acciones discriminatorias, donde no sólo se encuentra Colombia, sino otros países como El Salvador, Brasil, Ecuador, Perú y Francia.
Con esta retorsión Panamá podrá crear impuestos a dividendos, cargas tributarias y respuestas migratorias, restringir procesos de contratación, otorgamiento de concesiones y permisos, suspender el transporte terrestre, marítimo y aéreo, ya sea de carga o de pasajeros, entre otros, perjudicando así a estos estados que son considerados discriminatorios.
Panamá denunció a Colombia ante la OMC en 2013 por la imposición de un arancel a los productos textiles, prendas de vestir y calzado procedentes del país centroamericano y la OMC le dio la razón. Dicho cobro de aranceles produjo una caída de 30% en las ventas a Colombia, lo que condujo a una crisis económica en la zona franca panameña.
Finalmente será la OMC quien a través de un árbitro, defina cómo tiene que hacer Colombia el desmonte de sus aranceles proceso que podría tardar hasta 15 meses. El gobierno colombiano insiste en que está acatando los tiempos y los procedimientos establecidos por la OMC en su fallo para modificar los aranceles.
Todo este conflicto ha generado que Panamá tenga paralizado el proceso de aprobación parlamentaria del Tratado de Libre Comercio (TLC) con Colombia, firmado en el año 2013.
Es normal que, ante la situación, se presenten diferencias entre los países, y es que hace unos años el intercambio comercial entre ambos era del 36%, porcentaje mayor al actual. El reto está en normalizar dichas relaciones comerciales, pues las represalias que se están tomando afectan a ambos países.
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Sectores relacionados: Flores, Carbón, Cemento, Textil
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