De acuerdo con el ministro de Agricultura y Desarrollo, Rodolfo Zea, en el 2021 se han añadido 45 mil hectáreas al área sembrada en maíz amarillo tecnificado, registrándose un crecimiento de 34,5% respecto al 2020, para el dirigente de la cartera esto es el resultado de estrategias publicas y privadas como “SOYA – MAÍZ: Proyecto País” y la Agricultura por Contrato; sin embargo, Colombia está lejos de ser autosuficiente en la producción de este grano y otros cereales como el trigo y la soya.
En el caso particular del maíz, el país demanda alrededor de 7,2 millones de toneladas de las que solo produce 1,8 millones de toneladas, según cifras de FENALCEM, las importaciones del grano han crecido un 67% en los últimos 10 años. De acuerdo con Rodolfo Correa, secretario de Agricultura del departamento de Antioquia, “entre las principales razones por las que Colombia no iguala los niveles de producción de materias primas que tienen los demás países está la falta de tecnología y la ineficiencia productiva. Mientras el país no logre llegar a unos buenos niveles de tecnificación e industrialización de la productividad del agro es imposible tener autonomía y soberanía alimentaria”
