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Luego de que el gobierno tomara la decisión de bajar la mezcla del biodiesel en el acpm del 12% al 2%, 11 de las 12 plantas de este derivado de aceite de palma quedaron sin mercado, lo cual las vio obligadas a cerrar. Es decir que en la actualidad solo una planta en el país continúa operando al 100% (Ecodiésel). Las compañías que suspendieron la producción de biodiesel son Manuelita, BioD, La Paz, Alpo, BioSc, Odín, Romil, Biocombustibles y Derivados, Biodiésel de la Costa, Bgreen y Biocombustible.
Este fenómeno llevará a los cultivadores de palma de aceite a una disminución importante en la demanda, por lo cual deberán acumular el producto o venderlo a un precio menor. Según el presidente de Fedepalma, Jens Mesa Dishington, las medidas adoptadas por el Gobierno, en su papel de regulador de la política de biocombustibles, no han sido las más acertadas, “esa decisión coincidió con la tradicional baja estacional de la producción del segundo semestre”.
Por ello, el pasado 23 de septiembre, Fedepalma le envió una carta al presidente de la Federación Nacional de Biocombustibles, Jorge Bendeck Olivella, en la cual manifiesta que “ante los graves hechos ocurridos con motivo de la entrada en vigencia de la mezcla del 12%, de incumplimiento por parte de algunas empresas industriales y la consecuente suspensión de esta medida por parte del Gobierno, consideramos que esa Federación nos debe una explicación, al Gobierno y a los palmeros, por lo sucedido”, pues asegura que no solo está poniendo en riesgo a los cultivadores, sino al Fondo de Estabilización de Precios Palmero.