La batalla comercial entre Colombia y Panamá, como consecuencia de los aranceles decretados por el Gobierno Nacional en años anteriores al ingreso de estos productos, se conserva ante la decisión de mantener un impuesto mixto.
En 2012, el Gobierno Nacional decretó aranceles hasta del 10% al calzado y a los textiles provenientes de Colón; más un cargo de $5 dólares por cada contenedor enviado desde allí. Esta maniobra, tuvo como fin enfrentar el contrabando y el lavado de dinero, factor negativo para el correcto desarrollo de la industria nacional.
Por su parte, el país centroamericano llevó el caso ante la Organización Mundial del Comercio (OMC), la cual en junio del año en curso ordenó desmontar el decreto inicial, bajo el soporte de que viola los topes permitidos por ese organismo multilateral en materia arancelaria. Ante esto, y previo a la reunión que se llevará a cabo entre los representantes de los dos países para buscar una pronta solución a este conflicto, el ministro de Hacienda y Crédito Público, Mauricio Cárdenas Santamaría y por la ministra de Comercio, Industria y Turismo, María Claudia Lacouture, expidieron un decreto sobre el tema con el que pretende combatir el lavado de activos. Esta decisión, stará vigente hasta el próximo primero de noviembre, sustituye el decreto de febrero del 2014, el cual originó tensiones con las autoridades del país vecino.
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