De acuerdo al Comité Colombiano de Productores de Acero de la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (ANDI), en lo corrido del año han ingresado al país 23 mil toneladas de barras de acero aleadas provenientes de Turquía y China, las cuales no cuentan con las especificaciones técnicas, y no se han sometido a controles de calidad, poniendo en peligro la sismo resistencia de las edificaciones.
El riesgo proveniente de esta situación ha sido estudiado por la Superintendencia de Industria y Comercio, entidad que descubrió semanas atrás la existencia de una fábrica que reciclaba las barras de construcciones demolidas para venderlas como nuevas.
Esta denuncia realizada por la ANDI, y atendida por el Icontec, advirtió que cualquier ferretería o constructora que las utilice se expondrá a multas de hasta $1.200 millones y decomisos.
Por otra parte, se conoció a través de la Asociación Latinoamericana del Acero (Alacero) que, durante el primer trimestre del año, en Latinoamérica se consumió 16,6 millones de toneladas de acero laminado, 7% más respecto al mismo período de 2016, siendo México (10%), Costa Rica (115%) y Brasil (5%) los países de mayor variación anual. Adicionalmente, la asociación afirmó que las importaciones de América Latina alcanzaron 5,6 millones de toneladas de acero laminado, 14% más que lo importado entre igual periodo de 2016.
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