Según un informe de Rabobank, la demanda mundial de productos lácteos disminuyó en el primer trimestre de este año al igual que los precios pagados a los productores, que deben lidiar con costos de producción elevados, lo que hace que la perspectiva para el presente año sea incierta. El informe señala que esta disminución en la demanda se debe a los efectos inflacionarios y a que los consumidores buscan opciones de menor precio. Como resultado, los procesadores y las cooperativas lácteas iniciaron el año con inventarios costosos y los consumidores están siendo más frugales.
Según el informe, debido al escenario macroeconómico global, se espera que la desaceleración del consumo en los hogares continúe en los siguientes meses. Sin embargo, el debilitamiento en las cotizaciones de los lácteos podría impulsar el comercio internacional de quesos y leche en polvo, y se espera que el suministro de exportación tenga un comportamiento dinámico en comparación con el año anterior. El informe también destaca que el buen comportamiento del comercio internacional dependerá en gran medida de la demanda en China y del desarrollo de sus políticas internas, lo que podría ser un aliciente para el aumento de los precios.