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Esta semana se conoció el proyecto de resolución que contiene los lineamientos que empezarán a regir en 2022 para el etiquetado de alimentos envasados. Con esta nueva reglamentación se busca que la información nutricional de los alimentos y bebidas que se comercialicen en el país se presente de forma clara y comprensible para el consumidor. En esta regulación se estableció, por ejemplo, que el etiquetado no debe presentar el producto de forma que induzca a una interpretación falsa de su contenido nutricional o de sus beneficios en la salud.
En la resolución se plantea la prohibición de que el etiquetado contenga expresiones asociadas a: “propiedades que le hagan entender al consumidor que un alimento pueda sustituir un tiempo de comida en cuanto al aporte nutricional se refiere; propiedades que no estén basadas en evidencia científica; propiedades que indiquen, representen, sugieran o impliquen que el alimento es útil, adecuado o efectivo para aliviar, tratar o curar cualquier enfermedad o trastorno fisiológico; que las asociaciones (médicas o de salud) avalen productos alimentarios con fines de publicidad y mercadeo; Inducir o promover hábitos de alimentación nocivos para la salud”, entre otros.
