Fuente imagen: Pixabay
Las restricciones de movilidad, el creciente número de compras por internet y el pasado paro en Colombia, tienen corriendo a los comerciantes para cumplir con los pedidos.
Sumado al paro nacional de 45 días en el país, que afectó principalmente el puerto de Buenaventura y el cierre de carreteras para el comercio mundial; la contingencia por el Covid-19 paró el transporte de mercancías, en medio de un aumento por compras en medios digitales y servicios de domicilio. La situación ha llevado a un incremento en los llamados servicios de última milla para la entrega de mercancías, donde la capacidad de los contenedores y barcos aún no se ha ajustado al aumento en el nivel de carga.
Lo anterior, sumado las condiciones de transporte marítimo de Estados Unidos; ha influido en el incremento en los fletes, que para Colombia está entre el 45 y 50 por ciento. Tal es el caso de Aviomar, donde los fletes navieros han aumentado un 55 por ciento en los últimos meses debido también a la falta de normalización en el transporte aéreo, por medio del cual se mueve el 20 por ciento del comercio mundial. Sin embargo, en cuanto al transporte por carga que mueve el restante comercio mundial (80%), Aviomar ha mantenido los servicios marítimos en el resto del mundo, a pesar de que también sufrió aumento en los fletes de 35 por ciento para Asia, 45 por ciento para EE. UU. y de 27 por ciento para América Latina.