Al finalizar 2022, ingresaron al país 72.589 toneladas de productos lácteos por un valor de 276.671.100 dólares CIF. En comparación con 2021, los volúmenes fueron 19,5% más altos que las 60.737 toneladas importadas ese año, mientras los costos fueron 52% superiores. Así, la importación de lácteos en 2022 fue la más cara en la historia del país. La información fue publicada en el reporte de la Oficina de Planeación e Investigaciones Económicas de Fedegán.
Por montos de importación, la leche entera en polvo ocupó el primer lugar con 109,6 millones de dólares correspondiente a 24.438,7 toneladas, mientras la leche desnatada en polvo se encuentra en segundo lugar, con 104,7 millones de dólares correspondientes a la importación de 29.204 toneladas.
Por su parte, y como en años anteriores, Estados Unidos encabezó la lista de países de origen, con un 45% de los costos de importación de lácteos. A su vez, Chile ocupó el segundo lugar, de allí provienen 11.065 toneladas por un valor de 46,3 millones de dólares, de las cuales 10.200 toneladas fueron de leche en polvo.