Se proyecta que los rendimientos de maíz en Estados Unidos alcancen un nivel récord en la próxima cosecha, con una producción estimada de 182,7 bushels por acre. Sin embargo, el impacto de las altas temperaturas y la presencia de enfermedades en los cultivos podrían afectar el resultado final, según las estimaciones de la gira anual de Pro-Farmer.
Según un informe del portal Agronegocios, la producción total de maíz en EE.UU. se prevé en 16.200 millones de bushels, una cifra ligeramente inferior a la previsión del Departamento de Agricultura de EE. UU. (USDA), que es de 16.700 millones. En cuanto a la soya, la producción se estima en 4.200 millones de bushels, con un rendimiento promedio de 53 bushels por acre, lo que coincide estrechamente con las proyecciones del USDA.
Los datos recopilados durante la gira por siete estados mostraron un gran potencial en los cultivos de la zona occidente, aunque se detectaron enfermedades como la roya del sur, que podrían disminuir la cosecha. En contraste, los cultivos de la zona oriente se vieron afectados por la fatiga generada por el calor extremo.
La variabilidad fue una constante durante el recorrido: mientras que en Indiana se observaron rendimientos récord de maíz, las condiciones en Ohio fueron calificadas como las más secas desde 2008. Pro-Farmer concluyó que, si bien el potencial de la cosecha es alto, “el clima de agosto tendrá la última palabra”.
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