Hace varios años se viene hablando de una posible venta de Isagén, compañía dedicada a la generación y comercialización de energía, pero en 2013 parece que este proceso si se va a formalizar, generando gran controversia en nuestro país.
Foto: www.sxc.hu (Autor:Ruben G.S.)
Isagén es actualmente la tercera generadora más grande del país, pues atiende alrededor del 16% de la demanda nacional de energía. Además, la compañía posee y opera seis centrales eléctricas, ubicadas en los departamentos de Antioquia, Santander, Caldas y Tolima.
Ante el interés que ha despertado la venta de la porción del Gobierno en la generadora de energía, se decidió subir el precio base por acción de la compañía. A finales del mes de septiembre el Consejo de Ministros avaló que el precio por acción será de 3.178 pesos, frente a los 2.850 pesos, lo que representa un incremento del 11,5 % en el precio que se había dispuesto cuando se anunció la venta de la empresa, en la que la Nación tiene una participación del 57,7%. El Gobierno esperaba obtener 4,5 billones de pesos por la compañía, con el nuevo precio base dicho monto podría elevarse a los 5 billones de pesos. Posiblemente a finales de este mes sale la oferta de venta.
Dos de los jugadores colombianos que han manifestado su interés en el proceso de adquisición de la compañía, el Grupo Argos y la Empresa de Energía de Bogotá (EEB), ratificaron que seguirán en la puja, pese al aumento del precio base para la oferta de acciones.
En su último reporte sobre competitividad global, el Foro Económico Mundial sitúa a Colombia en la posición 108 entre 144 países en términos de la calidad de la infraestructura de transporte, por esto se piensa dirigir los recursos del Estado hacía la infraestructura de transporte, un sector prioritario para el desarrollo y que beneficia a todos los colombianos.
El Ministro de Hacienda Mauricio Cárdenas ha insistido en que los recursos de la venta serán destinados exclusivamente a la financiación de obras de infraestructura, y que no se gastarán antes del próximo 7 de agosto, cuando se posesione el nuevo Gobierno. El dinero entrará al Fondo de Infraestructura Nacional (FIN), entidad creada para cubrir las necesidades de financiación de las megaobras.
Por su parte, el Sindicato Nacional de Trabajadores de Isagén –SintraIsagén se opone a la venta de la compañía, ya que un proceso de privatización debilita la posición estratégica del Estado en el sector eléctrico, puesto que es la única empresa que garantiza la expansión del sistema a través del desarrollo y la promoción de proyectos de generación de energía eléctrica (en la actualidad está terminando la construcción del proyecto Hidrosogamoso y tienen siete en estudio). Adicionalmente, por ser una empresa de economía mixta con mayor participación accionaria del Estado, este actúa como un regulador natural de las tarifas del servicio público de energía.
Por otro lado, el Expresidente Álvaro Uribe en el mes de agosto interpuso una acción popular contra el Gobierno por la venta del 57% de la compañía Isagén y esta fue suspendida de manera provisional, pero El Tribunal Administrativo de Cundinamarca dijo que el demandante no reunió los requisitos de ley para proceder a admitir la demanda. “Me parece muy grave que el Estado se desprenda del control de Isagén porque es una empresa que puede generar una utilidad superior $500 mil millones”, Alvaro Uribe
