Las acciones de la compañía Suzuki se presentaron una caída del 9.63% al hacerse pública la irregularidad cometida por la automotriz en la evaluación de sus vehículos.
En una conferencia de prensa en el ministerio de Transportes, el presidente del grupo, Toshihiro Suzuki, informó que el problema no concierne a vehículos vendidos fuera de Japón. Adicionalmente, dichos datos se remontan a 2010 y afectan a 2,1 millones de vehículos de los 16 modelos comercializados en el país nipón.
Según el representante de la compañía, los valores conseguidos a través de los métodos de evaluación utilizados no son falsos, pues se explican por la localización de las pruebas, ya que, según él, se realizaron “en una colina cercana al mar, con condiciones meteorológicas, y sobre todo de vientos, que afectan las mediciones”.
Todo esto sucede a raíz del escándalo de Mitsubishi Motors, generando que el Gobierno nipón solicite a todas las empresas del sector realizar investigaciones internas para detectar posibles casos similares.
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