Una recesión está definida como el periodo en el cual la actividad económica decrece por determinado periodo en el tiempo, donde pierden dinamismo el consumo, la inversión y el empleo. En el contexto económico global actual, hay varios factores tanto externos como internos que contribuyen a que las expectativas sobre este posible suceso en Colombia aumenten para 2023.
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Adicional de los desafíos geopolíticos, la depreciación del peso colombiano y las reformas del gobierno, los daños por el invierno que afectan principalmente al sector agrícola y pecuario; son las principales señales de un ambiente complejo para 2023.
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Sectores que crecerán en 2023
A pesar de las estimaciones negativas, un estudio de BBVA Research (Los sectores que más contribuirán al crecimiento en 2023), muestra que, para el 2023, el sector público, la construcción y el entretenimiento, serán los sectores que jalonarán la economía colombiana, puesto que su desempeño será mayor que el del PIB.
– La construcción: Para el 2023 se estima que este sector crezca un 4,9% generado principalmente por la ejecución de obras civiles, ya que, aún está en discusión los diferentes planes de desarrollo tanto departamentales como municipales, donde la principal inversión va dirigida al mejoramiento de la malla vial y a la infraestructura, lo cual también genera empleos.
– Sector público: Parte de la agenda del nuevo gobierno es aumentar la inversión social, que se traduce en mayor gasto público. Por medio de los subsidios se busca ayudar a que varias familias mantengan su nivel de gasto ante este escenario de coyuntura. Se estima que el crecimiento de este sector para el próximo año será de 5,4%, es decir, 0,3 % más que este año.
– El entretenimiento: en el presente año, se espera que este sector registre un crecimiento del 17%, de manera que este buen comportamiento contribuya a impulsar la actividad del año próximo, la cual, debido a la disminución del consumo generalizada, se espera que crezca un 2,3%.
Además, también influyen factores externos como la reactivación de las relaciones comerciales con Venezuela, que, aunque pueda tomar algún tiempo, generaría la entrada de divisas, que el gobierno estima serían aproximadamente 4.500 millones de dólares. Los giros de remesas de colombianos en el exterior, los cuales ayudarían a mantener el gasto de las familias. Y, finalmente, las materias primas como el petróleo, el café y el carbón, que fueron la principal fuente de divisas en el presente año, pues en 2022, el sector minero debe entregar al estado en materia de impuestos y regalías una suma de aproximadamente 15 billones de pesos, es decir, tres veces más que en el 2021.
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¿Cómo han sido las crisis anteriores en Colombia?
Una de las crisis más profundas que tuvo Colombia en el presente siglo fue la de 1999. En esta, se registró una inflación del 16% y una contracción del PIB de 4,2%. Además, el desempleo alcanzó el 17%. Esta crisis tuvo dos agravantes principales: la crisis asiática y la suspensión del servicio de la deuda en Rusia, lo que produjo problemas en el financiamiento. Andrés Pastrana, presidente en dicho periodo, trató de suavizar las deudas del sistema financiero, otorgó créditos blandos de Fogafin y ofreció seguros de pagos a intermediarios. Por su parte, el Banco de la República dejó de intervenir en el mercado cambiario y dispuso un sistema de flotación para el tipo de cambio.
Para la crisis del 2008, el segmento más afectado fue el sector externo, ya que, Colombia tenía un déficit pronunciado en la balanza comercial, el cual se agravó debido a que los principales socios comerciales redujeron la demanda de ciertos bienes y la inversión extranjera directa. La inflación en este periodo alcanzó una cifra de 7,67% y la economía colombiana experimentó un crecimiento del 2,5%. Además, el desempleo registrado fue del 11.3%, es decir, fue significativamente mucho más bajo que en la crisis del 99.
