La alta inflación y la crisis económica han transformado los hábitos de consumo en Colombia, destacándose el creciente favoritismo hacia las tiendas de descuento duro, conocidas como hard discounters, para realizar las compras del hogar. Según NielsenIQ (NIQ), especialista en inteligencia del consumidor, durante el 2023 este modelo de comercio experimentó un crecimiento del 12,1% en volumen, en contraste con otros canales que sufrieron contracciones debido a las restricciones financieras de los consumidores.
El análisis de NIQ revela que los productos de primera necesidad como leche, aceite, papel higiénico, carnes frías y detergente para ropa son los principales impulsores de este fenómeno. El 75% del crecimiento del canal se atribuye a un aumento en el consumo por parte de los hogares, reflejando una tendencia hacia compras más sustanciales en categorías de consumo masivo.
Además, el 25% restante del crecimiento se explica por la migración de compradores de tiendas de barrio, supermercados y droguerías hacia los hard discounters. Camilo Escobar, director de Customer Success para NielsenIQ Colombia, enfatiza que este fenómeno refleja una tendencia consolidada en el país, donde el canal de descuento duro ha alcanzado una penetración del 96% de los hogares colombianos en el 2023, convirtiéndose en el segundo de mayor relevancia.
El ascenso de los hard discounters ha sido notorio en la última década, pasando de representar el 2% del gasto en valor del consumo masivo en 2014 a un 25% en 2023. Esta expansión ha impactado en otros formatos, como supermercados de cadena y tiendas de barrio, que han perdido participación en el gasto de los hogares.
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Hard Discount, el “Game Changer” del Retail Colombiano (Infografía)
