La Ley 2439 de 2024, que modifica la Ley 1480 de 2011, tiene como objetivo mejorar la protección del consumidor en el comercio electrónico. Regula los cargos asociados a las operaciones de crédito realizadas mediante sistemas electrónicos, estableciendo que todos los cargos derivados del uso de tecnología serán considerados como intereses, y deben ser informados de manera clara al consumidor. Además, los costos relacionados con servicios como seguros, avales o firma electrónica, que no estén directamente vinculados al crédito, no se consideran intereses, siempre y cuando se informen correctamente al usuario.
La ley también establece nuevas obligaciones para los proveedores de comercio electrónico, quienes deben suministrar información clara y detallada sobre los productos o servicios ofrecidos, así como cumplir con plazos de entrega y devolución de dinero. En caso de que un consumidor ejerza su derecho al retracto, la devolución debe realizarse en un plazo máximo de 15 días calendario. La Superintendencia de Industria y Comercio tiene mayores facultades para supervisar y proteger los derechos de los consumidores en el ámbito digital, con el fin de garantizar transacciones transparentes y evitar abusos. La ley entró en vigor el 19 de diciembre de 2024.
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