La pandemia y las restricciones impuestas para disminuir la velocidad de contagio aún tienen sus efectos negativos en el sector de acero, a pesar de que, para agosto de 2020 la capacidad productiva de este se había reactivado en un 27%. Adicionalmente, esa serie de acciones han conllevado a una escasez del producto, lo que ha incrementado la preocupación por parte del sector.
Algunas de las causas de este problema se deben a: dificultades en la movilidad a nivel internacional y la reactivación del mercado interno chino y de Estados Unidos. Además, la oferta y demanda de acero se ha visto afectada por la lenta recuperación de la producción tanto a nivel nacional como internacional. Así mismo, la reactivación e inicio de obras de infraestructura y construcción han generado alzas históricas en los precios del acero para el primer semestre del año.
Cabe resaltar que sectores como construcción, infraestructura y logística dependen en gran medida de este material, lo que podría ocasionar afectación en la cadena de valor y en la reactivación económica del país.
