Diversos productores agrícolas se han quejado de la posición en que los está colocando el alto nivel impositivo del país y las elevadas tasas de interés que viene con incrementos sostenidos desde septiembre de 2015, haciendo referencia a la tasa de intermediación, que a la fecha se ubica en 7,75%.
El caso lo dejó ver el presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia, SAC, Hernán Hernández Peñaloza, quien aseguró que con los incrementos que ha venido realizando en Banco de la República en la tasa de intervención con la excusa de controlar la inflación, ha condenado a los productores de los cultivos de tardío rendimiento como la Palma aceitera, el cacao y los cultivos maderables. El ejecutivo agregó que al iniciar el periodo producción ya se debe hasta tres veces los préstamos requeridos de entrada. El caso del caucho que demora hasta siete años para producir, la situación puede ser peor.
En el caso de los impuestos la situación no es distinta, los empresarios deben cultivar pocas superficies para evitar el gravamen, lo cual hace que no pueda competir. Por otro lado, si un productor busca cultivar a escala y aumenta su inversión, inmediatamente se debe pagar impuesto sobre el capital.
Estos factores desde el punto de vista de la SAC son contradictorios con los mismos planes del gobierno nacional que buscan incentivar la producción rural como son el Plan Colombia Siembra y la Ley Zidres. Mientras tanto, las declaraciones de Hernández son consistentes con nuestro Índice de Riesgo Sectorial, IRS, construido para el mes de mayo que se ubicó en 28 unidades para el mes mayo, es decir, en S4, el segundo peor nivel de los cinco posibles y que refleja también la caída permanente que ha registrado el sector durante el último año.
