El banano, insignia del agro colombiano, es uno de los principales productos de exportación gracias al reconocimiento internacional del sector. Cultivado en más de 53.000 hectáreas, principalmente en el Urabá y en el Caribe, este fruto se divide en dos variedades: Gros Michel para el mercado local y Cavendish para exportación, representando el 95% de la producción total.
A pesar de los desafíos enfrentados en 2023, incluyendo una disminución del 29% en las ventas, el presidente de Augura, Emerson Aguirre, proyecta un año de recuperación para la industria bananera en 2024. Se espera un crecimiento del 5% en las exportaciones, impulsado por una mejor presencia climática y una reacción positiva de los mercados internacionales.
El sector bananero genera 44.000 empleos formales, con un 92% sindicalizado. La sostenibilidad ambiental y social del banano lo convierte en un producto altamente valorado, siendo Europa su principal destino de exportación, seguido por Estados Unidos y el Reino Unido.
A pesar de estos logros, el mercado local enfrenta el desafío del bajo consumo per cápita, con solo cuatro kilos de banano al año en comparación con los 14 kilos en Europa. Colombia ocupa el quinto lugar en exportación de banano, liderado por Ecuador, seguido de Guatemala, Costa Rica y Filipinas.
El sector bananero también ha enfrentado amenazas, desde desafíos biológicos como el Fusarium R4T hasta cuestiones de orden público y seguridad, con el narcotráfico afectando la región de Urabá. Las empresas, como Grupo GreenLand, han invertido significativamente en medidas de seguridad, destinando alrededor de $12.000 millones en 2023 para combatir el narcotráfico.
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