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El año pasado fue retador para casi todos los renglones productivos, debido a que debieron adaptarse a las nuevas dinámicas de los consumidores en medio de la pandemia y el sector lácteo no fue ajeno a este contexto. Sin embargo, el sector resultó favorecido por las nuevas tendencias de consumo y experimentó un crecimiento de 38% en las exportaciones que totalizaron US$27.2 millones y de 6% en el consumo, pues el gasto de los consumidores superó los $26 billones.
De acuerdo con Camilo Montes, director ejecutivo de la Cámara de la Industria de Alimentos de la Andi, “en 2020 se recuperó el estatus sanitario de fiebre aftosa, lo que nos habilita a entrar a mercados que se habían cerrado. Segundo, la diplomacia sanitaria del Gobierno se consolidó en procesos con países de la región y tercero, la gestión comercial de las empresas. Prevemos que ese acceso a los mercados se va a mantener”.
