Difícil es la situación en las que se encuentran los productores de arroz del país y aún más complicada la de aquellos que se encuentran en áreas donde, no sólo afecta la gran oferta del producto, sino también los factores climáticos como las fuertes lluvias que han ocasionado la caída de puentes obstruyendo el tránsito de carga pesada entre algunas regiones.
Dentro de los fenómenos que tienen en jaque a los gremios del sector arrocero, está la elevada producción de arroz que supera las estadísticas históricas, lo cual ha hecho que los precios bajen disminuyendo el margen de beneficios de los cultivadores y en algunos casos, según lo declaran, generando pérdidas sustanciales.
Por otro lado y de forma más regionalizada, en el departamento del Tolima se implementó una alta sobretasa por el uso del agua en el cultivo de arroz, acción que despertó el descontó en los cultivadores. En La Mojana mientras tanto, el problema es la falta de maquinaría para la recolección del grano, lo cual ha influido en la pérdida de parte de la cosecha. Finalmente y como uno de los peores casos, se encuentra Casanare, donde la caída del puente sobre el río Charte imposibilitó la movilidad de los camiones y demás maquinaría recolectora.
Por ahora, los casos de La Mojana y Casanare ya están siendo resueltos, en el caso del Tolima se trata de una nueva regulación que difícilmente se podría tumbar. En lo relacionado con las posibles pérdidas del sector por la alta producción, los entes gubernamentales han dejado claro que no se establecerá un control de precios sobre el producto final.
