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Juan Carlos Mira, el actual presidente de Asocaña que ejercerá en el gremio hasta la primera semana de septiembre, habló sobre los retos que tiene el sector de cara al futuro, dentro del cual se encuentran las importaciones de etanol de EE.UU., que ingresan a precios considerablemente bajos dado el subsidio de exportación de la industria de etanol que recibe dicho país. Se espera que máximo en octubre el gobierno tome una decisión al respecto, y el escenario ideal es la imposición de un derecho compensatorio de 22 %.
Otra de las preocupaciones es la estimulación de la producción en India y Tailandia que ha generado excedentes de azúcar históricamente altos. Además se sigue trabajando en la lucha contra la desinformación que afecta el consumo.
Frente a algunos proyectos que se encuentran en marcha, el líder gremial informó
Programa Vías Azucareras: “la meta es la construcción de 40 vías internas en un período de diez años, disminuyendo el tránsito por centros poblados, vías nacionales e intermunicipales y además dejamos implementado un plan socioambiental para la prevención y control de incendios, de la mano con las comunidades, donde se avanza en acciones de mitigación”
Fondo social: creado entre ingenios y cultivadores con el objetivo de financiar las estrategias que mejoren las ventas en el sector.
La caña nos une: una iniciativa que fortalece la relación con las comunidades por medio de jornadas sociales, de atención médica y recreación.
Según Mira “el sector continúa invirtiendo en investigación y desarrollo a través de Cenicaña, lo cual le permite al país mantener su liderazgo como el de mayor productividad del mundo”. Finalmente, el aprovechamiento de residuos y la ampliación en la producción de biocombustibles representan un panorama favorable para el sector.
Desde allí también se avanza en la diversificación y aprovechamiento del potencial productivo (aprovechamiento de residuos, combustibles de segunda generación) y en una mayor eficiencia tanto en campo como en fábrica.
Hay otro tipo de inversiones que tienen que ver con la posibilidad de ampliación de la producción de biocombustibles, las cuales dependerán de las decisiones que tome el Gobierno Nacional.
“El valor de las exportaciones de azúcar es 43 veces el valor de las exportaciones de piña, 42 veces el valor de las de mango y 33 veces el valor de las exportaciones de aguacate”.
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¿Considera que la región debe apostarle a la diversificación de cultivos?
La caña ha sido una muy buena opción de ingresos para los agricultores de la región. El desarrollo de cultivos como los de frutas pueden convivir perfectamente con el área sembrada actualmente en caña en el Valle.
Vemos, por ejemplo, que el Valle ha ganado una participación importante en la producción y exportación de frutas: en piña es el segundo productor y participa con el 51% de las exportaciones; en mango participa con el 43% de las exportaciones; en aguacate con el 10%; el Valle es el mayor productor de banano común de Colombia.
No obstante, el valor de las exportaciones de azúcar es 43 veces el valor de esas exportaciones de piña, 42 veces el valor de las de mango y 33 veces el valor de las exportaciones de aguacate.
¿Y sus principales preocupaciones?
Son más bien retos y el principal tiene que ver con la coyuntura actual relacionada con las importaciones subsidiadas de etanol originarias de Estados Unidos, que le han causado un daño enorme a la producción nacional y al programa de oxigenación de gasolinas del país.
