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En los últimos días, varios gremios colombianos han expresado su descontento frente a la deficiencia logística en la carga y descarga de contenedores vacíos, especialmente en el puerto de Buenaventura. La congestión en la terminal portuaria genera millonarias pérdidas y afecta tanto a importadores como a empresas de transporte. Ante esta situación, Colfecar envió una carta a la ministra de Transporte, Ángela María Orozco, y se sumó al llamado de Fedetranscarga y la ACC.
Según Colfecar, algunas navieras no se están llevando los contenedores vacíos y ponen trabas para recibir los mismos, lo que genera represamiento e impide que se reciban los contenedores de transportadores terrestres. De acuerdo con Manfri Parra, director nacional de Camioneros de Colombia, al puerto de Buenaventura ingresan diariamente más de 1.000 vehículos con contenedores y dada la falta de espacio, recibir un contenedor vacío pasó de tardar un par de horas a ser un proceso de 3 a 6 días.
Colfecar dice que los patios de contenedores deben ser supervisados por la Superintendencia de Transporte, y propone como parte de la solución que los cobros por demoras en entregas por parte de las navieras se detengan cuando se logre “el enturbiamiento en el sitio dispuesto para esa actividad”, así mismo, que las navieras otorguen a los importadores un periodo superior a los 10 días libres establecidos para evitar el cobro por días adicionales que varía entre US$120 y US$150.
